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CRÍTICA (20SEFF): “La Tierra Prometida” (“The Bastard”)

Un western nunca falla.

© Bteam Pictures

El género Western es, sin duda alguna, uno de los géneros por excelencia en la historia del cine. No solo por ser uno de los pioneros, sino también porque es un género que ha ido evolucionando con el paso de los años, pero también ha sabido conservar su esencia y mantenerse en circulación por más de cien años. Películas como “El bueno, el feo y el malo”, “Sin perdón” o “Centauros del desierto” son grandes ejemplos de este género. Ahora, en pleno 2023, el director danés Nikolaj Arcel (“La Torre Oscura”, “Un asunto real”) nos deleita con su propia visión del western, demostrando por qué este género está más vivo que nunca.

“La Tierra Prometida” se desarrolla en el año 1755. El empobrecido capitán Ludvig Kahlen se dispone a conquistar los duros e inhóspitos páramos daneses con un objetivo aparentemente imposible: crear una colonia en nombre del rey. Sin embargo, el único gobernante de la zona, el despiadado Frederik de Schinkel, cree arrogante que esa tierra le pertenece. Cuando de Schinkel se percata de que su criada Ann Barbara y su servil marido han escapado para refugiarse con Kahlen, el privilegiado y rencoroso gobernante jura venganza y promete hacer todo lo que esté a su alcance para ahuyentar al capitán. Pero Kahlen no se deja intimidar y emprende una batalla tan desigual que pondrá en riesgo no solo su vida, sino también a la familia de personas marginadas que se ha formado a su alrededor.

© Bteam Pictures

Dura, violenta, realista, fría, sorpresiva; estas son algunas de las formas para describir esta impresionante película. “La tierra prometida” nos regala una de las mejores películas del año: un western nórdico, rural y con tintes de cine de época, donde se abordarán todo tipo de temas; desde la esclavitud hasta las relaciones amorosas, pasando por la realeza, hasta llegar a la venganza. Una película que lo tiene todo y pese a que su género de referencia es el western, eso no le impide tocar todo tipo de géneros y jugar con varios temas e historias. A lo largo del metraje, vemos el crecimiento de una persona y la cantidad de sacrificios que debe hacer para conseguir lo que se propone. De esta forma, se podría decir incluso que “La tierra prometida” es una historia de superación, demostrando que después de la tormenta viene la calma y por muchos problemas que se pongan en tu camino y por imposible que parezca, jamás debes rendirte.

Lo referente al apartado técnico no se queda atrás; la fotografía es absolutamente impresionante y todo lo relacionado con el diseño de producción y la puesta en escena es una maravilla visual. En la película abundan los colores más cálidos, dando una sensación de fuerza y seriedad. Al igual que todo lo técnico, el apartado artístico es increíble.

© Bteam Pictures

Una de las muchas razones de por qué esta película es tan buena reside en su elenco. Encabezado por el fantástico actor Mads Mikkelsen (“Otra Ronda”, “La Caza”, “Valhalla Rising”), que interpreta a un personaje imponente, con las ideas muy claras y sin miedo a hacer todo lo posible para conseguir su cometido, pero en general un personaje con mucho corazón y alma. Es maravilloso poder ver cómo se construye su relación con el personaje de Ann Barbara (“Raised by Wolves”, “Harpiks”), una joven que lo ha perdido todo y solo busca algo por lo que seguir viviendo. Pero indudablemente, Simon Bennebjerg (“The Guilty”, “El pacto”) como villano, se roba cada escena; ofreciendo un personaje odioso y repleto de carisma, con ideales muy claros y unos métodos tan crueles como desgarradores, demostrando que es un villano de pies a cabeza.

© Bteam Pictures

Como conclusión, “La tierra prometida” es una película magnífica. Un ejemplo de western rural, repleto de grandes momentos y una producción apabullante donde la venganza será solo el comienzo de una serie de consecuencias, que detonará en una de las mejores películas del año.

NOTA: ★★★★½

“LA TIERRA PROMETIDA”, ESTRENO EL 2 DE FEBRERO EN CINES.


TRÁILER:

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© Bteam Pictures

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Carlos Mera

Carlos Mera

Un enamorado del Cine y todo el apartado audiovisual, estudiante de Realización de Proyectos Audiovisuales y Espectáculos. Vivo para ver cine y nutrirme de todo tipo de historias.