CríticasPelículas

CRÍTICA (27FestivalMálaga): “Descansar en Paz”

Un thriller angustiosamente humano.

© Netflix

Planteemos el siguiente escenario. Eres un hombre que ha consagrado tu vida en constituir una familia capaz de sustentarse sobre sí misma a base de trabajo y dedicación. Una familia que te idolatra, y a la que estarías dispuesto a darle todo lo que estuviera en tu mano y más, y que ha vivido rodeada de un confort por encima del resto de tus compatriotas.

Ahora imaginemos que llegan las vacas flacas. Imaginemos que el sector en el que la empresa que heredaste de tu padre está sumida en una crisis derivada de la competencia casi desleal que suponen las importaciones a bajo coste y que se convierten en tu competencia directa.

Una empresa que empieza a tener pérdidas, que empieza a ser incapaz de financiarse por sí misma, y a la que insuflas dinero que te prestan los bancos, las entidades financieras “alternativas”, e incluso tus propios familiares. Dinero que no es suficiente para costear los grandes gastos derivados de los salarios de los trabajadores, el servicio doméstico que trabaja en casa, ni el colegio privado al que llevas a tus hijos.

Bajo estas circunstancias, entras en una situación de impagos, con una empresa que no produce lo suficiente como para poder hacer frente a las deudas e intereses que cada día suben de manera desorbitada, y que te fuerzan a vender parte de tus propiedades para hacerles frente. Pero aun así no es suficiente. Todavía le debes dinero a mucha gente, algunas de las cuales amenazan la propia vida de los tuyos. ¿Agobiante, verdad?

Pues esta situación tan asfixiante es la que el director Sebastián Borensztein (“Un Cuento Chino”) nos describe con sumo dinamismo y congoja durante la primera parte de la película “Descansar en Paz”. Una congoja que se transmite a través de una serie de planos cercanos y cerrados que encapsulan a la perfección el dramatismo del momento personal que vive el protagonista. Un dramatismo que emana de la interpretación sentida y contenida de Joaquín Furriel, quien llena la pantalla con su mera presencia, y que da vida de manera vívida a este padre de familia.

© Netflix

Un padre de familia que encuentra de manera tan trágica como fortuita una vía de escape a esta desesperanzadora situación, y que decide tomar sin pensárselo dos veces. Una decisión que le alejará de su familia por más de quince años, y que para cuando se muestra en la cinta, el espectador ha sido capaz de empatizar por completo con la tesitura a la que se enfrenta y las razones que le llevan a tomar tan drástica decisión. Un ejercicio de dirección abismal y que saben dotar de la expresividad visual suficiente al sentido guion escrito por el propio Sebastián junto con Marcos Osorio (“Los Simuladores”).

© Netflix

Guion que adapta la novela homónima de Martin Baintrub, y que se torna más lento y contemplativo a raíz de la decisión vital de Sergio. Un segundo tramo de la cinta donde el ritmo pausado se recrea en el impacto personal que tuvo en el protagonista alejarse de su familia por tanto tiempo, y que baja unas cuantas marchas en la carga dramática.

Dramatismo que se torna en curiosidad, y que el espectador visualiza desde una mirada más tierna y apesadumbrada gracias al cambio de registro interpretativo de Joaquín, el cual se torna en intimista y sincero. Un cambio que sabe recoger el director a través de unos planos más descriptivos para mostrar la nueva realidad en la que vive el protagonista, y el contraste de esta con la vida que dejó atrás.

© Netflix

Todo ello convierte a “Descansar en Paz” en un empático thriller capaz de hacer conectar desde el inicio con la idiosincrasia de su personaje protagonista, permitiéndole viajar junto a él por este camino de sacrificio autoimpuesto. Una película en dos tempos que emana desesperación y humanidad a partes iguales.

NOTA: ★★★½

“DESCANSAR EN PAZ”, ESTRENO EN NETFLIX EL 27 DE MARZO.


TRÁILER:

PÓSTER:

© Netflix

¡SÍGUENOS!

Mario Hernández

Mario Hernández

Cinéfilo granadino de la generación del 98 (1998 más concretamente), amante del cine independiente y las grandes sagas. Entusiasta de una buena sesión de peli y manta, soy graduado en Economía por la Universidad de Granada (UGR) con nivel C1 de inglés. Actualmente, estoy realizando el curso de Crítica de Cine en la Escuela de Escritores de Madrid.