Netflix compra Warner Bros., incluyendo HBO Max, por 82.700 millones de dólares: ¿Adiós a los estrenos en cines? ¿Una sola plataforma de streaming?
El gigante absoluto del entretenimiento.
Es, sin duda, la noticia del día… ¿Qué digo? De la semana, de los últimos meses o incluso del año, si uno quiere ponerse dramático, ya que podría marcar un antes y un después en el sector del entretenimiento. ¿Para bien? Para mal? Eso todavía está por verse, aunque los optimistas son pocos.
Netflix ha decidido que ser el gigante del streaming ya no le basta: ahora quiere ser el gigante a secas. Y para conseguirlo, ha anunciado hoy la compra de Warner Bros., incluidos sus estudios de cine y televisión, HBO Max y HBO, por la astronómica cifra de 82.700 millones de dólares de valor empresarial (72.000 millones de valor patrimonial).
Aunque la operación no fue nada fácil. Las negociaciones se alargaron durante semanas, con pujas de titanes como Paramount Skydance y Comcast compitiendo ferozmente, hasta que Netflix se llevó el gato al agua. El acuerdo se cerrará a lo largo de los próximos 12-18 meses. Sí, da vértigo.
¿Qué llevó a Warner a adoptar una medida tan drástica? En resumidas cuentas, la compañía venía arrastrando una profunda crisis financiera desde la pandemia de COVID-19. Si bien 2025 supuso un respiro gracias al éxito de títulos como Una película de Minecraft, Superman y Los pecadores, en los tres años previos sus pérdidas netas conjuntas ascendieron a 22.000 millones de dólares.
Para que nadie pierda de vista la magnitud de la maniobra: estamos ante la mayor adquisición hollywoodiense desde que Disney se comió a Fox en 2019 por 71.000 millones de dólares. Por aquel entonces, se integraron sagas como X-Men, Los Cuatro Fantásticos o Alien, y el propio Deadpool, en su tercera película ya bajo la bandera del ratón, no paró de hacer bromas sobre su nuevo hogar, con frases como «al carajo Fox, me voy a Disneylandia» y un enfrentamiento con Hugh Jackman frente a un gigantesco logo de Fox enterrado.
Y esto no es un caso aislado. Es más habitual de lo que parece. De hecho, en 2022, Amazon adquirió los legendarios estudios de Metro-Goldwyn-Mayer por 8.500 millones de dólares, sumando franquicias como James Bond y Rocky a su catálogo, y el año pasado Paramount y Skydance se fusionaron por cifras similares. Hollywood está jugando al Monopoly a lo bestia.
Así que, de pronto, series y películas tan incrustadas en la memoria colectiva como Los Soprano, Juego de Tronos, Looney Tunes, Harry Potter o todo el mastodóntico Universo DC pasarán a convivir bajo el mismo techo algorítmico que criaturas de la plataforma líder en streaming.
«Nuestra misión siempre ha sido entretener al mundo», afirmó Ted Sarandos, CEO de Netflix. «Al combinar la increíble biblioteca de series y películas de Warner Bros., desde clásicos atemporales como Casablanca y Ciudadano Kane hasta favoritos modernos como Harry Potter y Friends, con nuestros títulos que definen la cultura como Stranger Things, KPop Demon Hunters y El juego del calamar, podremos hacerlo aún mejor. Juntos, podemos ofrecer al público más de lo que le gusta y ayudar a definir el próximo siglo de la narración».
El también codirector ejecutivo de Netflix Greg Peters añadió: «Esta adquisición mejorará nuestra oferta y acelerará nuestro negocio durante las próximas décadas. Warner Bros. ha ayudado a definir el entretenimiento durante más de un siglo y sigue haciéndolo con ejecutivos creativos y capacidades de producción fenomenales. Con nuestro alcance global y nuestro modelo de negocio probado, podemos presentar a un público más amplio los mundos que crean, lo que ofrece a nuestros miembros más opciones, atrae a más fans a nuestro servicio de streaming, el mejor de su clase, fortalece toda la industria del entretenimiento y crea más valor para los accionistas».
Por su parte, David Zaslav, presidente y director ejecutivo de WBD, celebró: «El anuncio que hacemos hoy une a dos de las mayores empresas de narración de historias con el objetivo de ofrecer a más personas el entretenimiento que más les gusta ver. Durante más de un siglo, Warner Bros. ha emocionado al público, captado la atención del mundo y dado forma a nuestra cultura. Al unirnos, nos aseguraremos de que personas de todo el mundo sigan disfrutando de las historias más resonantes durante generaciones».
La noticia ha generado incontables preguntas: ¿Qué cambia para nosotros, los espectadores de a pie, con Netflix y Warner Bros. bajo el mismo techo? ¿Se acabará la marca Warner tal y como la conocemos? ¿Desaparecerá de las salas de cine como principal punto de estreno?
Durante una llamada con Wall Street, Sarandos aclaró que seguirán distribuyendo las películas de Warner Bros. en cines, pero parece que quiere que el periodo de exhibición sea más corto: «Este año hemos estrenado unas 30 películas en cines, así que no es que tengamos nada en contra de las películas en las salas. Mi rechazo se ha centrado principalmente en los largos periodos de exclusividad, que realmente no creemos que sean tan favorables para el consumidor». Entre esos estrenos que menciona se encuentran Frankenstein, de Guillermo del Toro; Una casa llena de dinamita, de Kathryn Bigelow; y Puñales por la espalda, de Rian Johnson.
No todos ven la operación con buenos ojos. Cinema United la considera «una amenaza sin precedentes para el negocio global de la exhibición cinematográfica» y urge a los supervisores a «examinar con detenimiento los detalles de esta transacción y entender el impacto negativo que tendría en los consumidores, la exhibición y la industria del entretenimiento».
Asimismo, el Sindicato de Guionistas de Hollywood advirtió: «Las fusiones continuas en la industria del entretenimiento están perjudicando a los trabajadores, mermando la competencia y la libertad de expresión, y malgastando cientos de miles de millones de dólares que se invertirían mejor en un crecimiento orgánico».
Y, ¿qué pasa con HBO Max? ¿Se fusionará con Netflix en un único megaservicio de streaming? El comunicado oficial insinúa tal posibilidad: «Al combinar las extensas bibliotecas de cine y televisión, así como la programación de HBO y HBO Max, los suscriptores de Netflix tendrán aún más títulos de alta calidad para elegir. Esto también permite a Netflix optimizar sus planes para los consumidores, mejorar las opciones de visionado y ampliar el acceso al contenido». Es decir, podrías tenerlo todo en un mismo lugar, si bien esto también podría implicar una subida de precios.
El calendario de estrenos de Warner Bros. para 2026 incluye Cumbres Borrascosas, en febrero; Supergirl, en junio; la película sin título de Alejandro Iñárritu y Tom Cruise, en octubre; y Dune: Parte tres, de Denis Villeneuve, en diciembre. Y el de 2027 tiene, entre otras, las secuelas de Superman, Una película de Minecraft y The Batman.
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